Distribución y estado de conservación de las palmas cubanas (Arecaceae)

Resumen

Las palmas son vitales para los ecosistemas tropicales y subtropicales, con alrededor de 2600 especies reconocidas. En Cuba, su excepcional diversidad y endemismo, con el 80 % de las especies endémicas, subrayan su importancia ecológica. Sin embargo, más del 50 % de las 71 especies evaluadas están amenazadas, con 11 en peligro crítico y una extinta (Roystonea stellata). Géneros como Coccothrinax y Copernicia son especialmente notables, pero se enfrentan a graves amenazas de especies invasoras, agricultura intensiva, tala no regulada y cambio climático. Estos retos son especialmente graves para las especies microendémicas, muchas de las cuales quedan fuera del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, que sólo cubre el 58,4 % de los hábitats críticos de las palmas. Las incertidumbres taxonómicas y la escasez de datos genéticos dificultan aún más los esfuerzos de conservación. Aunque las actualizaciones realizadas conforme a los criterios de la UICN han perfeccionado las evaluaciones de conservación, los avances han sido insuficientes para invertir el declive. La conservación eficaz exige una estrategia integrada que combine medidas in situ y ex situ, planes específicos para las especies vulnerables y protección prioritaria de las zonas infrarrepresentadas. Igualmente esencial es implicar a las comunidades locales, las entidades gubernamentales y las partes interesadas en la aplicación de prácticas sostenibles. Los estudios moleculares para resolver las ambigüedades taxonómicas y delimitar con precisión las especies son fundamentales para garantizar la supervivencia a largo plazo de estas especies emblemáticas y sus ecosistemas. Para salvaguardar el futuro de las palmeras cubanas, que siguen siendo una piedra angular de la biodiversidad caribeña, es necesario un planteamiento holístico que aborde tanto los factores ecológicos como los socioeconómicos.